Hemos hablado mucho de nuestro proceso creativo, de cómo hacemos las cosas. Hemos explicado bien el motor de nuestro proyecto, nuestro compromiso para con el paisaje y nuestro entorno. Pero tengo la sensación de que no hemos hablado lo suficiente de nuestros productos, que son al fin y al cabo nuestra razón de ser. Quizás esto se deba a que hablan por sí solos. La calidad de sus materias primas 100% naturales, salta a la vista nada más abrir el frasco. Paisaje en una botella. Naturaleza envasada.

Pero hay muchas cosas que decir, porque la singularidad de nuestros productos merece una explicación que ayude a entender mejor porqué no son diferentes, sino que son simplemente otra cosa.
Existe la idea generalizada de que un perfume debe acompañarte dondequiera que vayas y despertar la atención y admiración de quién entre en el amplio y expansivo campo de acción de su fragancia. La utilización de esencias sintéticas y otros productos derivados del petróleo asegura ese extraordinario poder de permanencia y atracción. Pero en realidad se trata solo de un disfraz. A la gente le gusta disfrazarse. Nada podemos decir en contra de eso. Nuestro objetivo se sitúa unos pasos más allá, en busca de una mayor conexión personal con una naturaleza que nos fascina, explica y supera. Nuestras creaciones te invitan a vivir la experiencia olfativa, de una forma mucho más íntima. No están pensadas para seducir a los demás sino para reconquistarte a ti mismo. Por eso nos gusta decir que son perfumes para los que nunca han llevado perfumes (y esta frase no se nos ha ocurrido a nosotros, sino que nos la ha dicho mucha gente al descubrirnos).

Después esta el origen 100% natural de sus materias primas. Cuando hablamos de materias 100% naturales queremos decir que todas las materias utilizadas para dotar a nuestras capturas de su característico aroma son aceites esenciales y absolutos de la mayor calidad, provenientes de maderas, resinas, hojas y flores de cultivo o de recolección salvaje. No aceptamos ningún tipo de aceite rectificado o modificado. También utilizamos hidrolatos destilados por arrastre de vapor y tinturas maceradas, realizadas en nuestras instalaciones con plantas que han sido recolectadas por nosotros en sus espacios de origen. Las ventajas de no aplicarse productos sintéticos en la piel son conocidas. No lo es tanto el hecho de que las fragancias naturales interactúan con nuestra epidermis, transformándose y adaptándose a quien las lleva, deviniendo personales y potenciando nuestra esencia.
Si bien es cierto que estas fragancias no permanecen de igual forma que las sintéticas, sus efectos en nuestro organismo son mucho más duraderos y su beneficio a largo plazo es incalculable. De nuevo, uno no las lleva para “marcar su territorio” y venderse a los demás. Las lleva para sentirse bien, re-conectarse con lo que hay de auténtico en él y finalmente, sí, para relacionarse con su entorno desde esa verdad.

Nuestros productos no sólo proponen unos aromas distintos, intensos y exclusivos sino que invitan, todos ellos, a una nueva forma de disfrutarlos y vivirlos. Una nueva manera de experimentar y entender la experiencia olfativa, más y mejor conectada a nosotros y a nuestro entorno.
Finalmente es muy sencillo: La Naturaleza es sabia y sabe cuidarnos, porque por mucho que intentemos olvidarlo, somos Naturaleza.
Una curiosidad:
Es fantástico cuando puedes incorporar a tu discurso de marca los comentarios que te hacen los usuarios. Ya os he balado de uno, pero aquí os dejo algunas perlas más. La palabra pues, a nuestras bravas narices:
«No solo huelen bien sino que sientan bien»
«Son enormemente adictivas. Nadie puede renunciar a lo que sabe que le hace bien»
«Yo las llamaría fragancias de escapada, porque te ayudan a escapar de la pesadez urbana. A mí me hacen viajar lejos, entre árboles, flores y matas»
«A mi BOSC me activa por las mañanas. MUGA me da confianza, me la pongo antes de una reunión difícil. Y CALA es más nocturna. Ideal para una cena relajada entre buenos amigos»
Todas las fotos de la maravillosa y siempre bella (también por fuera) @monicabedmar
